Una mirada al proyecto “Fortalecimiento institucional y de política para incrementar la conservación de la biodiversidad en predios privados en Colombia GEF – G5”

 

César Marulanda – Presidente Junta Directiva Resnatur

 

 

Este documento presenta una mirada general al proyecto “Fortalecimiento institucional y de política para incrementar la conservación de la biodiversidad en predios privados (PP) en Colombia”, después de tres años de su ejecución. Enfocado en la Orinoquia colombiana en los departamentos de Casanare y Vichada, el proyecto es gestionado por el Grupo Colombiano Interinstitucional de Herramientas Privadas para la Conservación - G5. Su financiamiento proviene del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF por su sigla en inglés) y el Programa de las Acciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), y es administrado por The Nature Conservancy (TNC).

 

Actualmente el G5 está conformado por TNC, Fundación Natura, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) - Colombia, Parques Nacionales Naturales de Colombia y Resnatur. Esta iniciativa privada se conformó en mayo de 2002 y empezó siendo G4, pues no contaba con la participación de Parques Nacionales Naturales de Colombia. Su interés se basó en “avanzar en el desafío de posicionar y reforzar el creciente interés de la conservación privada y el deseo de cooperar en el cumplimiento de las metas de conservación de la biodiversidad, y así avanzar en este tema de trabajo de gran importancia para el país y la sociedad colombiana” [1].

 

Entre los años 2002 y 2005 se realizó el Primer Seminario de Servidumbres Ecológicas (2002) y posteriormente se desarrolló el Segundo Seminario de Herramientas para la Conservación Privada en Colombia (2003). A través de la participación en diferentes eventos internacionales se fue generando la necesidad de crear una red latinoamericana sobre el tema, que toma fuerza en Cancún (2004) para luego, en el 2006 convocar en Colombia el VII Congreso de Conservación en Tierras Privadas. En este evento se invitó a Parques Nacionales Naturales de Colombia a conformar lo que hoy es el G5. Desde entonces, esta iniciativa ha venido funcionando como una alianza público – privada en la que dos organizaciones mundiales, TNC y WWF, dos nacionales, Fundación Natura y Resnatur, actúan desde sus experticias y articulan, discuten y ejecutan proyectos comunes con Parques Nacionales Naturales de Colombia. En conjunto se buscan caminos que permitan avanzar en el tema de herramientas de conservación privada, y que estas se reconozcan y valoren debidamente como esfuerzos de conservación de la sociedad civil, entendidos cada vez más como procesos voluntarios.

 

El desarrollo del trabajo del G5 ha sido una labor de construcción de confianza entre las organizaciones participantes, alimentada por las fortalezas de cada una de ellas y en donde las sinergias permiten subsanar las debilidades e incrementar el impacto. El G5 se ha convertido así en un espacio donde es posible discutir y precisar las diferencias, y construir a partir de ellas.

 

Como integrante del G5, Resnatur ha trabajado en los tres últimos años en el proyecto “Fortalecimiento institucional y de política para incrementar la conservación de la biodiversidad en predios privados en Colombia”. Ha sido un reto muy interesante porque ha permitido el relacionamiento estrecho con las organizaciones miembros del grupo. En el actuar cotidiano y a través del trabajo conjunto en el proyecto, hemos detectado muchas diferencias en nuestras formas de trabajar y desde allí hemos tratamos de generar alternativas comunes que en medio de las circunstancias nos han permitido crecer como personas y como organizaciones.

 

En cuanto al trabajo con productores forestales y ganaderos, el proyecto ha sido muy importante porque en la búsqueda por generar procesos concretos con los productores, se han identificado vacíos conceptuales que ha sido necesario subsanar. Es evidente que existen muchas divergencias entre lo planteado en un proyecto en términos de sueño y lo que se va encontrando en el día a día de cada una de las unidades forestales o ganaderas con las que tenemos relación.

En la actualidad se trabaja con 12 propietarios ubicados en los departamentos del Vichada y Casanare: cuatro proyectos forestales en la cuenca del río Bita en el municipio de Puerto Carreño (Vichada), siete fincas ganaderas con ecosistemas de sabana inundable en Casanare y una finca ganadera en La Primavera (Vichada). Aunque las hectáreas oficialmente adjudicadas por el Incoder son 48.203,7 realmente se trabaja en la formulación de planes de manejo en las áreas totales que administran los propietarios correspondientes, es decir 64.678 ha.

 

El ejercicio del proyecto GEF – G5 tiene un hilo conductor clave: la conservación – producción. Las tierras que de manera voluntaria están en procesos de conservación deben acompañarse de procesos tendientes a formas amigables de producción y este es el centro del enfoque. Esto implica una forma de asumir los procesos productivos en un intento por demostrar que la conservación no debe ser entendida como cero intervención y que, en este sentido, es posible hacer trabajos productivos sobre los paisajes sin que estos necesariamente se deterioren.

 

El proyecto se basa en tres objetivos cuyos resultados han sido liderados de manera específica por cada una de las organizaciones socias, a saber:

 

  1. Coordinado por WWF, este primer resultado tiene un ámbito nacional y se centra en los ajustes de políticas y leyes relacionadas con prácticas productivas que promueven la conservación en predios privados.
  2. El segundo resultado que es coordinado por Fundación Natura trabaja sobre el fortalecimiento de capacidades institucionales para el desarrollo de prácticas de conservación en predios privados de la región de Los Llanos.
  3. El tercer resultado es coejecutado por Resnatur en convenio con la Fundación Horizonte Verde y coordinado técnicamente por Lourdes Peñuela R., directora de la mencionada fundación. Se centra en un programa piloto cuyo objetivo es mejorar la conservación de la biodiversidad y los ingresos de los productores en actividades ganaderas y de manejo forestal. 

 

Si bien los tres resultados están ligados, no ha sido tan sencillo lograr el aterrizaje de conceptualizaciones políticas en los escenarios de producción, dado que en términos reales, allí se involucran todos los entes territoriales y el tiempo junto con dificultades propias del diseño del proyecto no permiten evolucionar con la velocidad que se soñaba.

 

En el proceso de ejecución del objetivo 3 se ha logrado establecer un total de 8.513 has nuevas para la conservación en esta zona de la Orinoquia. Este total corresponde a cuatro reservas nuevas afiliadas a Resnatur  La Florida (2.474 ha), Cantaclaro (1.378 ha), Irosebia (3.819 ha) y Nicaragua (842 ha).

 

Uno de los productos importantes del trabajo se relaciona con la formulación de planes de manejo y acuerdos de conservación. En este sentido se llevaron a cabo varias jornadas de trabajo con los propietarios a través de metodologías participativas para elaborar los planes. Actualmente se cuenta con siete planes de manejo para las fincas ganaderas de Casanare. Así mismo se están elaborando los cuatro planes forestales y el plan de manejo de la Reserva Natural Irosebia. Se editó el calendario fenológico con el apoyo de la Reserva Natural La Pedregoza así como el afiche informativo sobre las sabanas inundables. Paralelamente se está avanzando en torno a los acuerdos de conservación, uno en el sector forestal y otro en el sector ganadero.

 

Lo importante para destacar con estos datos no es un asunto meramente matemático, sino el ejercicio que está detrás de esta realidad en términos de convencimiento y red social de actores necesarios para hacer posible que se hable de casi nueve mil hectáreas en conservación. En este contexto también vale resaltar que existe mucho interés de participar en el proyecto por parte de diversos propietarios, tanto forestales como ganaderos, pero también hay dificultades de acceso, tiempo y dinero para atenderlos.

 

Resnatur participó en la organización y el desarrollo del Primer Foro Forestal del Vichada, específicamente con un panel sobre plan de manejo forestal sostenible con la contribución activa de los cuatro proyectos forestales piloto en la cuenca del río Bita. Con base en lo sucedido en el foro, se concertó y llevó a cabo una reunión en Yopal con la Corporación Autónoma Regional de la Orinoquia (Corporinoquia) y las cuatro unidades forestales, donde se lograron acuerdos importantes para aunar esfuerzos y trabajar conjuntamente durante todo el año 2014. Como resultado de este trabajo, hoy se habla de la posibilidad de que el proyecto acompañe a Corporinoquia en el proceso de ordenamiento ambiental del territorio orinocense.

 

Es interés de las organizaciones del G5 dejar en el territorio, todas las posibilidades abiertas para seguir apoyando el proceso en los años venideros, a pesar de que la ejecución del proyecto finaliza en noviembre de 2014. Para Resnatur, que está en la zona a través del Nodo Orinoquia desde el año 2003 y tiene un aliado esencial en la Fundación Horizonte Verde con sede en Cumaral, existe mucha expectativa en términos de los logros que podamos tener a finales de 2014. Lo obtenido con la ejecución del proyecto permitirá o no la continuidad de muchas acciones y la credibilidad de las organizaciones que nos hemos comprometido en el día a día en la conservación - producción

 



[1] Solano Clara, Bogotá, febrero 2007, Memorias VII Congreso Interamericano de Conservación en Tierras privadas. P. 19.